Escuchar tus canciones utilizando Spotify; almacenar todas tus fotografías en Google Photo y llevar todos tus documentos de trabajo donde quiera que vayas utilizando Microsoft 365 son ocurrencias de todos los días gracias a la nube. Esta tecnología ha revolucionado nuestras vidas, y hoy, siempre y cuando tengamos una conexión a internet, las posibilidades no tienen límite. Desafortunadamente, el término nube puede sonar complejo o difícil de entender. Por fortuna, esto no es cierto, ya que la nube es un concepto simple con el que todos deberíamos estar familiarizados.
¿Qué es la nube?
La nube es internet. Almacenar datos en línea puede ser inmensamente benéfico tanto para personas como para negocios ya que la información que almacenas en línea tiene generalmente un menor riesgo de desaparecer o fallar debido a mal funcionamiento de hardware. Además, almacenar tus datos en la nube también ofrece el beneficio de movilidad. Ya no necesitarás llevar tu computadora a donde quiera que vayas para acceder a tu información, simplemente conectarte a internet te permitirá obtener acceso a tus archivos utilizando tu Smartphone o cualquier computadora que tengas a mano.
¿Qué es la computación en nube?
El concepto de computación en nube se refiere al uso de computadoras remotas para almacenar información diversa a la que puede accederse a través de una conexión a internet. Tiene por objetivo el almacenamiento, manejo y procesamiento de datos y ofrece una alternativa más confiable para el almacenamiento que los métodos tradicionales.
Esta práctica reduce el riesgo de perder datos, ya que la información se almacena en máquinas altamente eficientes, que son menos propensas a riesgos inesperados como fallas o cuelgues. La computación en nube también ofrece a los negocios menores costos de entrada ya que con frecuencia ofrecen un modelo de precios “pagas por lo que utilizas” o por suscripción basado en usuarios o licencias, lo que elimina la necesidad de comprar hardware costoso cuando se despliega un nuevo sistema o se actualizan las herramientas actuales.
La falta de necesidad de utilizar equipamiento costoso también presenta un excelente potencial de escalabilidad ya que el crecimiento ya no requiere inversiones sustanciales para mantener a la tecnología al paso del crecimiento. Simplemente actualizar el presupuesto para adaptarse al nuevo uso o la compra de nuevas licencias puede ser suficiente para mejorar la productividad y ajustarse a las nuevas demandas generadas por el crecimiento.
Por otra parte, la computación en nube es sólo un término abarcativo que engloba tres distintos tipos de modelos de negocios:
- IaaS: Infraestructura-como-Servicio (Infrastructure-as-a-Service) se refiere a la práctica de alquilar servidores seguros para almacenar datos como una alternativa a construir la infraestructura por tus propios medios. IaaS es el primer bloque de construcción del universo de computación en nube. Su objetivo primario es albergar información lo que lo hace el núcleo para los próximos modelos y engloba virtualización, servidores, almacenamiento y redes.
- PaaS: Plataforma-como-Servicio (Platform-as-a-Service) ofrece un ambiente óptimo para programación construido en una plataforma IaaS, lo que facilita la colaboración y mejora el proceso de desarrollo de software. PaaS ofrece a los desarrolladores un sistema operativo, un navegador web y una base de datos sin las preocupaciones que surgen de mantener infraestructuras digitales tradicionales.
- SaaS: Software-como-Servicio (Software-as-a-Service) es el ultimo bloque de construcción de la computación en nube. Encapsula tanto IaaS como PaaS para entregar el producto digital más integral posible. SaaS ofrece servicios de software completos en una plataforma completamente administrada por el proveedor. Los productos son entregados a través de navegadores de internet en forma de aplicaciones web o aplicaciones comunes, eliminando la necesidad de utilizar hardware poderoso ya que todo el procesamiento se hace remotamente a través del software. Además, las actualizaciones son automáticas, erradicando la necesidad constante de comprar nuevas versiones. Entre los productos SaaS se incluyen una amplia variedad de ofertas, permitiendo a las organizaciones enfocarse en sus prácticas nucleares y dejar los problemas de sistemas al proveedor. Este modelo ofrece el mayor nivel de escalabilidad, ya que incrementar su uso sólo requiere acceso a un navegador web.
¿Cuáles son los beneficios de la computación en nube?
Desde los negocios hasta las personas, todos pueden beneficiarse con esta práctica revolucionaria. Los cinco beneficios clave de la computación en nube son:
- Movilidad: accesible con solo tener una conexión a internet
- Confiabilidad: acceso a maquinaria de alta eficiencia sin inversiones importantes
- Adaptabilidad: modelos de precios flexibles y productos ajustados a necesidades específicas
- Escalabilidad: despliegue sencillo con barreras muy bajas para expansión
- Colaboración: una plataforma común donde las organizaciones y colaboradores pueden acceder a datos o compartir información con facilidad
¿Cuáles son los principales riesgos de la computación en nube?
A pesar de sus numerosos beneficios, esta práctica no viene sin algunas preocupaciones. Una desventaja importante es su alta dependencia de la internet, donde una conexión pobre puede llevar a un menor rendimiento, pero prácticas como permitir que el software opere en un modo fuera de línea pueden reducir considerablemente potenciales problemas.
Además, muchos negocios se preocupan acerca de la seguridad y privacidad de sus datos. Esto puede no ser preocupantes para el consumidor final regular. Sin embargo, la falta de “titularidad” sobre el software y compartir recursos crean problemas para los emprendimientos que trabajan con información sensible. Por fortuna, hay nuevos desarrollos en este campo constantemente, haciendo que sea más seguro cada día.
¿Por qué la computación en nube es importante para la construcción?
La computación en nube puede generar beneficios incontables para la industria de la construcción. Los sitios de trabajo se caracterizan con frecuencia por tener terrenos accidentados, y sin las condiciones óptimas que requieren las computadoras. El uso de software que sólo requiere smartphones o tablets para operar puede mejorar significativamente la productividad en el sitio. Permitiendo el acceso a documentación crítica desde cualquier dispositivo portátil o simplificando las tareas en los sitios de trabajo, la computación en nube inyecta dinamismo en el flujo de trabajo del negocio y permite a los profesionales de la construcción enfocarse en sus responsabilidades centrales y reducir el tiempo que se desaprovecha en tareas de menor valor.
Además, muchos sitios de trabajo usualmente no proveen una conexión a internet óptima, creando problemas con el rendimiento del software. Por fortuna, hay opciones como BulldozAIR, una Plataforma de Manejo de Proyectos para Construcción y Mantenimiento, que ofrece funciones como un modo independiente, donde los usuarios pueden ingresar datos fuera de línea y luego agregarlos a la nube mediante sincronización cuando haya una conexión a internet disponible.
La computación en nube ha revolucionado a muchas industrias. Desde la construcción a la salud, esta tecnología ha traído un número importante de beneficios a muchos campos. Si bien hay algunas preocupaciones, la tecnología ha evolucionado de manera notablemente rápida, con nuevas mejoras diarias en cuanto a eficiencia y seguridad.