Cuando pensamos acerca de un proyecto exitoso, pensamos acerca de un proyecto que cumple con los estándares dados, se completa a tiempo y dentro del presupuesto. Estos objetivos ciertamente deben ser alcanzados para que un proyecto sea exitoso a ojos de los accionistas. Si bien los proyectos deben cumplir con sus objetivos de costo, tiempo y calidad, criterios más amplios de éxito deben relacionarse con los objetivos primarios del proyecto – aquellos aspectos de la entrega del esquema que proveerán el beneficio anticipado.
¿Por qué fallan tantos proyectos? </em Con frecuencia, los contratistas focalizan su atención en el comienzo de un proyecto pero fallan en enfatizar la importancia de terminarlo. Acelerar hacia un proyecto un 90% terminado típicamente resulta en bajo niveles de energía y relaciones tensas debido al mal diseño, disputas, órdenes de cambio, etcétera. Los equipos de proyecto con frecuencia comienzan los proyectos con un empuje tan bueno que abandonan el planeamiento pre-laboral para demostrar la actividad en el proyecto. Ojalá este nivel de pasión existiese hasta la conclusión del proyecto. Es más, los clientes rara vez piensan en qué tan bien comienza un contratista, pero siempre recuerdan cómo terminan.
Entonces, ¿qué es el éxito y cómo se lo alcanza? Considerando cómo los edificios dan beneficios de negocios a sus dueños durante su tiempo de vida, es el punto de partida esencial para evaluar el éxito de un proyecto. Al hacerlo, considerar la creación de valor relacionada tanto a la operación del edificio y a su efecto sobre terceros ayuda a asegurar que se tomen consideraciones apropiadas acerca del impacto completo del proyecto. Algunos factores como la eficiencia del edificio, la localización y la calidad del espacio afectan el valor financiero del proyecto. A largo plazo la dimensión sustentable, como las emisiones de carbono de por vida, definen el éxito de una construcción.
Los proyectos exitosos también generan beneficios intangibles. Una gran inversión tiene un amplio impacto sobre sus alrededores y la comunidad. Proyectos particulares pueden tener un efectivo positivo del desarrollo de sus alrededores a través de calidad de diseño, o la mejora de una locación. Los grandes proyectos operan como peldaños, creando miles de puestos de trabajo y mejorando la infraestructura para mayores desarrollos.
El éxito nunca viene por sí solo – necesita las condiciones correctas para desarrollarse. Primero, es importante involucrar a todos y trabajar hacia el mismo objetivo. Dudas y titubeos deben ser eliminados probando que apuntar hacia el éxito es el objetivo de todos. En segundo lugar, invierte en manejo de proyecto. Es evidente que la salud del proyecto se revisa y refina constantemente para asegurar que alcance las expectativas y necesidades finales. Las tareas deben hacerse a tiempo y el foco debe ser mantenido durante toda la vida. ¡Simplemente usa BulldozAIR para reducir la ansiedad que las pilas interminables de documentos generan y para mantener a todos concentrados en el proyecto! Y, finalmente, comunicación. Aprovecha el conocimiento ganado en proyectos previos, tanto en la oficina como en el campo. Intenta conocer al equipo que trabaja en el proyecto y haz que compartan los problemas que han enfrentado en la obra – los trabajadores de obras son los primeros en encontrar problemas, así que haciendo esto le puedes ahorrar días o incluso semanas al proyecto.